Desde la perspectiva aplicada, como criterio base de detección preliminar, durante la realización del método de derivas de observación flotante sobre la zona geográfica de influencia del mapeo, es decir, la Zona Centro Tradicional de la ciudad de Pereira, y sus inmediaciones especialmente articuladas a través de áreas estratégicas para el desarrollo de prospectos de Territorios Urbanos de las Artes, las Culturas y los Saberes, a la manera de distritos creativos con alto impacto múltiple, social y turístico, económico, ambiental, cultural, gastronómico, musical, especialmente, los músicos callejeros (en el lenguaje propuesto por el presente proyecto, “Callejeros Sonoros”) incorporados en la muestra general preliminar de base, filtró a estos artistas mediante un criterio intuitivo de selección que diferenció a los artistas que se percibieron con una actitud sugestiva propia en su puesta en escena, ello debido a la premisa de la posible presencia en el espacio público de personas que recurren a la música manipulando su valor estético artístico creativo con el fin de aparentar ser músicos callejeros ante su “propósito real” de estar implementando como tal una de las tantas “prácticas mendicantes” que han caracterizado nuestras urbes modernas especialmente afectadas por fenómenos - tipo como las migraciones multitemporales historicas y el desplazamiento forzado por efectos de las dinámicas de conflicto y de crisis humanitarias.

Este hallazgo debe ser aclarado a la luz de su carácter intuitivo preliminar presuntivo desde la percepción de los observadores flotantes del equipo de exploración del proyecto, pues esta premisa se asume “hecho no-sometido a comprobación” dadas ciertos principios de realidad que se conciben inherentes a la condición humana (para este caso, el equipo de ejecutores supuso sería inviable consultar a los presuntos “músicos callejeros” si éstos lo son en lugar de asumirse como “agentes de una praxis mendicante que usan la música en tanto mecanismo de coacción social para conmover a sus potenciales ciudadanos y turistas).

La variabilidad detectada en los períodos de estancia y de permanencia de los músicos callejeros en el espectro del espacio público urbano, propiamente sobre la zona de influencia del área geográfica que comprende el proyecto, es decir, la Zona Centro Tradicional y fundacional de la ciudad de Pereira, suscitó en equipo investigación algunos grados de incertidumbre, especialmente tanto alrededor de la definición de los criterios definición de la muestra para la caracterización y mapeo como en función del desarrollo mismo del trabajo al momento mismo de transferir el conocimiento de los callejeros sonoros a la investigación, ello mediante la realización de las actividades involucradas para el logro de tales propósitos, se debe este hallazgo particularmente a las limitantes y las restricciones presentes en los músicos a la hora de coordinar su disponibilidad y de programar agendas de realización de estas actividades con estas personas; a razón de lo común que ha resultado la existencia de casos, durante la ejecución del proyecto, en los cuales una significativa proporción de los músicos van y vienen en medio de sus viajes; así estas situaciones, el equipo investigador se planteó algunas preguntas problémicas como las siguientes: ¿cómo abordar la condición de base de los músicos callejeros a quienes en gran medida les caracteriza su naturaleza nómade?; y, tras ser seleccionados algunos de estos músicos para integrar la muestra definitiva de la caracterización y mapeo, ¿cómo desplegar la metodología de investigación basada en la aplicación de entrevistas semiestructuradas complementariamente a la generación de fotografías de caracterización, para la totalidad de los diez(10) casos que compusieron la muestra, y la producción de narrativas audiovisuales con cuatro(4) de los diez (10) casos en referencia.

En este mismo orden de ideas, el equipo investigador debatió en torno a la pregunta - problema relacionada con la pertinencia de tomar para la muestra músicos callejeros para asumir su figura de “Callejeros Sonoros” en Pereira, en consideración de la volatilidad y la efimeridad de aquellos músicos quienes permanecen tiempos relativamente cortos en la ciudad, en contraste con los tiempos de ejecución del proyecto pues, en los términos de los tiempos metodológicos, para la ejecución del proyecto se debió responder a un horizonte estimado en un rango mínimo viable entre tres (3) y cuatro (4) meses, aproximadamente.

Para la mayoría de los músicos callejeros caracterizados y mapeados en la muestra definitiva del proyecto, incluso casi en su totalidad, las prácticas de intervención musical en los entornos vivos de las calles, presentan un significado clave en tanto el espacio público se convierte en gran medida en su “campo de entrenamiento”, en otras palabras, es cómo si se tratase de su “escenario vivo de ensayo” pues cuentan con un público betatester (léase, “de prueba en fase experimental embrionaria”) que les facilita perfilarse cómo futuros artistas profesionales y perfeccionarse a la par en torno a ello.

En Pereira, hasta la actualidad de las indagaciones realizadas alrededor de este presente proyecto, sobre un contexto real del estado del arte de la música callejera, especialmente en lo concerniente con los efectos de las políticas públicas y/o mixtas, público - privadas, en materia de las culturas, las artes y los saberes, con énfasis específico para el caso de este presente proyecto de caracterización y mapeo alrededor de los músicos que habitan y que intervienen las calles transformando a las mismas en entornos vivos de sensibilización a través de las prácticas estéticas y de las expresiones artísticas musicales, resulta clave plantear como desde el proyecto aún se percibe, a modo de diagnóstico de necesidades, la importancia que reside en pensar estrategias de innovación social abierta para nuestra ciudad que involucren planes, programas, proyectos e iniciativas que incidan en una economía creativa formal y libre, para y desde los músicos callejeros, mediante cuya evolución se potencialice el desarrollo de capacidades en torno al empoderamiento de estos músicos callejeros en función de una futura creciente industria del arte urbano en general y musical en particular. Este tipo de hallazgos requieren la confluencia de diversos esfuerzos entre esferas múltiples de la academia, las instancias estatales de la administración pública, las demás instituciones, entidades y demás sectores empresariales privados y de la sociedad civil organizada, en aras de la planeación estratégica prospectiva de equipamientos urbanos ajustados a las condiciones más óptimas de mínimos viables que requieren los escenarios vivos y los espectáculos en los espacios públicos (zonificación de áreas óptimas armónicas según usos del suelo declarados por los Planes de Ordenamiento Territorial respectivos, y sus propios modelos de ocupación regularizables mediante los debidos procesos legales y los adecuados instrumentos normativos para un uso temporal de los espacios públicos (p.e. en Pereira podría tomarse cómo referente de análisis algunos avances generados años atrás, tal como ocurre con la implementación del Decreto 078 de 2008, entre otras herramientas de regulación estatal del uso temporal y del aprovechamiento económico de los espacios públicos).

En la ciudad de Pereira, según lo observado y auscultado en el estado del arte actual de la música callejera, al parecer la oferta cultural de los músicos callejeros representa prácticamente una apuesta endógena emergente generada desde estos mismos artistas callejeros; en este contexto, entre los hallazgos que podrían referenciarse en materia de oferta cultural descentralizada, se detectan debilidades socioinstitucionales probablemente correlacionadas con limitantes y restricciones de base alrededor de la carencia de escenarios culturales para la realización de espectáculos públicos en las microescalas de los músicos callejeros (los andenes; las calles peatonales; las alamedas; plazoletas; miradores; bulevares; etc.) adaptados o adaptables a la naturaleza emergente y disruptiva por excelencia que caracterizan a estos fenómenos del arte musical callejero; de este modo, la presencia de uno o de varios productos culturales de ciudad, del tipo festivales enfocados específicamente en la promoción y en la circulación de músicos callejeros significa un factor de desaceleración de estas iniciativas estético-culturales y de sus economías populares libres en el conjunto de los ecosistemas de valor de la poco desarrollada industria creativa y cultural en la ciudad de Pereira.

Según indagaciones realizadas por el presente proyecto, la ciudad de Pereira carece de programas estatales públicos, privados y/o mixtos traducibles en algún prototipo de observatorio de las economías populares, emergentes y libres que contemple líneas estratégicas relacionadas entre otras con las artes, las culturas y los saberes de las calles, cuyos radares de detección de patrones disruptivos referencien la presencia, durante a lo menos un período de tiempo determinado, de artistas de la calle, para el caso del presente piloto con énfasis en artistas musicales callejeros, en aras de contar con caracterizaciones, mapeos y demás componentes de investigación social cultural aplicada en función del soporte que estos componentes podrán brindar en tanto apoyo a la toma de decisiones basadas en data e información estratégica producida y sistematizada mediante dispositivos relacionales que se articulen a través de modelos helicoidales de gestión del conocimiento, involucrando en los mismos esferas sociales, institucionales, empresariales, etc., del tipo Estado / Academia Ciencia, Tecnologías e Información / Sectores Empresariales Privados / Organizaciones Sociales y de la Sociedad Civil Organizada / Territorios y Comunidades / Y demás grupos de interés y agentes de apuesta o stakeholders.

En las lógicas de definición del muestreo preliminar, para el presente proyecto, la posibilidad de seleccionar músicos callejeros, podrían evidenciarse casos interpretados desde la subjetividad de los investigadores como “personas en situación de calle” inmersas en prácticas mendicantes, en apariencia musicales, pues este fenómeno podría afectar el objeto de estudio alrededor de una caracterización y un mapeo cultural; en este sentido, merece relieve aclarar que el equipo ejecutor del proyecto, en definitiva, tomo como criterio de selección la praxis emergente, el origen musical y sus reales vocaciones artísticas musicales, al ponerse en escena en el espacio público.

En función de los criterios de ejecución de la presente ruta de investigación del proyecto, a manera de conclusión, se pone en manifiesto lo indispensable que resulta para el modo de investigación implementado por el equipo ejecutor, la permanencia de los músicos callejeros en la ciudad, en correlación con su disponibilidad para realizar las fases y sesiones metodológicas.

Para el proyecto, adoptar al espacio público como "escenario vivo de ensayo" para crecer y desarrollarse profesionalmente hacia futuro, representa un hecho clave para la toma de decisiones en materia de políticas mixtas, público / privadas, en relación con lineamientos y directrices de ordenamiento territorial que definan modelos urbanos de ocupación del espacio público con estructuras adaptadas mediante criterios de zonificación, con el propósito de ampliar la oferta cultural de equipamientos adecuados para estos tipos de intervenciones, razón por la cual resulta fundamental la implementación de programas de formación de públicos orientados hacia una comprensión más holística del rol que cumplen los músicos callejeros tanto al transformar al espacio público en un “laboratorio de ensayos” como al deleitar a los viandantes ciudadanos, visitantes y turistas en general con sus expresiones musicales resignificando a las calles en su misma “naturaleza escénica generadora de sentidos y contenida por fenómenos de semiosis emergentes” con importantes impactos y efectos en términos de “ciudades culturales creativas”, “territorios de las artes, las culturas y los saberes” en permanente tránsito y “entramados urbanos proclives a un turismo musical orgánico, socialmente incluyente y relacional” en entornos vivos, en tiempo real.

La necesidad de implementación de lineamientos y de directrices en materia de políticas públicas y/o mixtas, público - privadas, para la ciudad, en lo relacionado con las artes, las culturas y los saberes de los fenómenos, las prácticas y las tendencias urbanas emergentes, para el caso piloto implicado por el presente proyecto alrededor de la música callejera, requiere voluntad político institucional y de articulaciones entre encadenamientos productivos cruzados que materialicen visiones estratégicas intersectoriales con apuestas estratégicas de ciudad enfocadas hacia un turismo musical que sirva de multiplicador de las cadenas de valor de sectores como el de la gastronomía y el ocio socioconstructivo, cuyas proyecciones económicas y financieras, hacia futuro, aporten significativamente en el P.I.B. Producto Interno Bruto de la ciudad, propicien la generación de regalías endógenas, desde y para municipio mismo, con impactos y efectos sociales y ambientales de espacio público, mediante factores de disparo de nuevos paradigmas ciudadanos y turísticos que agregan valor estratégico a las buenas prácticas de la música callejera, transformando imaginarios ciudadanos y turísticos en pro de los entornos vivos de un espacio público efectivo convivencial, seguro, ordenado y controlado, en aras de prospectar una ciudad creativa, sensible y amable con propios y con extraños, un rasgo éste fundamental y característico del ADN y del espíritu de la ciudad de Pereira: "querendona, trasnochadora y morena" (en los mejores sentidos y resignificaciones de esta expresión).

Una oferta cultural descentralizada del arte y de la cultura callejera debería ser impulsada desde diversas fuerzas vivas sociales, organizacionales, institucionales e incluso empresariales, mediante sinergias distribuidas entre convergencias de los sectores públicos, a la manera de lineamientos y directrices de políticas estatales que fomenten la cultura callejera emergente y comunitaria, en confluencia con el turismo urbano, en aras de activar estas cadenas de valor de la música emergente como apuesta estratégica de ciudad la cual contribuya en la ampliación de los enlaces estratégicos entre la oferta y la demanda mediante estrategias de formación de formación de públicos para la sensibilización ciudadana y de turistas (uno de los metapropósitos y metaobjetivos de este presente proyecto de laboratorio vivo con músicos callejeros), en aras de elevar la calidad de vida de los ciudadanos tanto cómo de los músicos callejeros en sí mismos, situando entre los imaginarios de las estrategias de marketing de ciudad a las artes, las culturales y los saberes de la música callejera en función del posicionamiento estratégico de un turismo musical emergente y popular de excelencia mundial. En este sentido, a manera de conclusión estratégica del proyecto, se recomienda la inclusión social de políticas estatales en materia de política cultural pública y/o privada que fomenten la oferta cultural en función de este campo de la música callejera; esta investigación, esperamos, podrá servir de insumo hacia presentes y futuros análisis estratégicos que podrían retroalimentar diversas herramientas de participación social ciudadana orientadas en torno a la toma de decisiones públicas estatales y/ privadas en materia de cultura de la música callejera, idealmente con la concurrencia de las visiones y las percepciones estratégicas generables por los mismos músicos callejeros, tanto aquellos diez (10) casos de caracterización y de mapeo involucrados en la muestra definitiva del presente laboratorio vivo, como el resto del universo de músicos callejeros que pudiesen detectarse e instar a un ejercicio de ciudad de esta naturaleza.

En conclusión, las apuestas que las políticas estatales en materia de artes, culturas y territorios implementen en función del fomento, la promoción, el crecimiento y el desarrollo de programas, planes y proyectos de acción local para ciudades intermedias, como Pereira, orientados a la detección, la caracterización, el análisis y la prospección de patrones emergentes de fenómenos de arte callejero, para nuestro caso en particular, la música callejera, catalizarán probablemente en los próximos años el surgimiento de iniciativas de ciudad, algunas de carácter público estatal, otras de naturaleza privada empresarial, y algunas mixtas público-privadas que incidirán en la consolidación de futuros ecosistemas de valor alrededor de un sector musical callejero más estructurado y mejor autoorganizado, incluso correlativo con un auge progresivo de una industria local callejera de la música que se articule mediante ecosistemas creativos de las artes, las culturas y los saberes en cuyo seno evolucionen formas diversas de economías populares formales con patrones eficaces de empleabilidad, competitividad sistémica (léase coopetitividad o cooperación con competitividad) y calidad de vida digna para los músicos callejeros, concibiendo sensiblemente al espacio público como un escenario vivo cohabitado por diversos públicos viandantes.